Creíamos que ayer iba a ser el día de Microsoft y su Windows 10, pero WhatsApp nos rompió los esquemas lanzando la versión web de su servicio. Sí, habéis oído bien: podemos utilizar WhatsApp desde la web. Pero hay una mala noticia, y es que ese servicio es compatible con todas las plataformas móviles excepto iOS.
Como ya nos explicó Aitor Carbajo ayer, no es que desde WhatsApp nos hayan cogido manía. Es el funcionamiento de esa web, que por le forma en la que se ha construido no puede comunicarse adecuadamente con la aplicación de WhatsApp para iOS. Y sabiendo que va para largo, llega la hora de preguntarse si es WhatsApp o es Apple la que tiene que ceder para que esa web funcione bien.
Las "armas" de cada compañía para justificar el fallo
A grandes rasgos, el problema es el siguiente: WhatsApp necesita enviar directamente desde el móvil esos mensajes a la nueva web del servicio, pero es algo que no se puede implementar en iOS ya que Apple limita lo necesario para que los mensajes se envíen en segundo plano.
Una de dos: o WhatsApp modifica esa web para que funcione adecuadamente en todas las plataformas sin excluir a nadie, o Apple permite el envío de esos mensajes de WhatsApp en segundo plano como una excepción para que un servicio utilizado por casi todos pueda seguir evolucionando equitativamente. ¿Quién cede?
WhatsApp tiene su enorme cuota de mercado como excusa, y todavía más en España donde 98 de cada 100 móviles tiene la aplicación instalada. Para ellos, si Apple se resiste, los usuarios que quieran disfrutar de todas las ventajas del servicio de mensajería móvil por excelencia pueden empezar a considerar la compra de un Android, o un móvil con Windows.
En Apple, por otro lado, podrían tomárselo como un punto desde el que luchar. Si iOS no puede ser compatible con la web de WhatsApp, usa iMessage. Incluso podrían hacer campaña señalando todos los problemas de privacidad que han tenido, frente a la resistencia de iMessage incluso ante las agencias estadounidenses.
¿Quién tiene la culpa y quién tiene que ceder?
A nivel personal, como usuario primordialmente de otras plataformas de mensajería y relegado a WhatsApp en asuntos familiares (seguro que no soy el único en esta situación), el no poder utilizar la web no me representa mucho problema pero se convierte en esa "astilla" que debería resolverse. Hay cientos de millones de personas con un iPhone en el mundo, y que la nueva web de WhatsApp no se pueda utilizar es un buen varapalo para ellas.
Por lo tanto, mi conclusión es la misma que en todas las disputas y fallos de compatibilidad entre plataformas: el principal perjudicado es el usuario y por lo tanto mi dedo acusador va tanto para Apple como para WhatsApp. Una empresa y un servicio tan potentes deberían haberse puesto de acuerdo y resolver esto a priori, y no ahora que tenemos la web en el aire y el gran fallo ha salido al aire. A los usuarios experimentados no les resultará molesto, pero a la gran masa de usuarios generales esto no les va a hacer ninguna gracia.
Sólo espero que, a partir de ahora, ambas compañías trabajen juntas sin demasiados intereses personales por medio para ofrecer la máxima compatibilidad para todos. Si no, esto puede ser una mancha en el expediente que puede hacer daño en el futuro.
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